El reportaje de Bob Culny en Madeira sobre una pirámide atlante en la que no cree se transformará contra todo pronóstico en su mayor pesadilla. A doscientos metros de profundidad una expedición germano-rusa dirigida por el doctor Wolfram ha encontrado varias figuras de cristal capaces de generar antigravedad y con ello la posibilidad de conquistar en exclusiva el espacio… Algo que los servicios de inteligencia japoneses y norteamericanos no están dispuestos a consentir. Tras escapar de su acoso en el fondo marino, Bob se unirá contra su voluntad al grupo que viaja a Siberia donde Wolfram espera desarrollar un prototipo circular con el debido secreto… Un lugar tan recóndito y vigilado que sólo la increíble tecnología nipona en robótica les dará la oportunidad de acercarse sin ser descubiertos. Pero Nograv no es sólo una novela de ciencia-ficción. En realidad me he valido de ella, sobre todo del profesor Búkobin, para incluir varios temas que me apasionan desde la niñez.