Este libro es dedicado en especial a las mujeres obreras que llevan la palabra de vida como lámparas a sus pies. Ellas se identifican como discípulas de Jesucristo y todos los días crecen grandemente en la gracia y en el entendimiento de la palabra de Dios. Son inspiradas por el amor de Jesucristo y ellas se levantan todos los días a pelear la buena batalla de la fe. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. (Mateo 16:24). En este libro, Jesucristo invita a todas las mujeres que quieran ser mujeres obreras a caminar con él en los jardines santos fundados por su amor. En el Jardín de la Misericordia, en el Lugar Santísimo; en el Jardín de la Gracia, en el Lugar del Altísimo; y en el Jardín de las Vencedoras, en el Lugar Celestial. En estos tres jardines santos las mujeres obreras aprenden a cómo anclar su fe en el trabajo que terminó Jesucristo en la Cruz, cómo dar el testimonio del Espíritu Santo, cómo recibir el amor de Dios y cómo reconocer que ellas sí pueden vivir una vida con poder, triunfos y victorias mientras mantengan sus miradas fijas en Jesucristo. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios. (1 Juan 5:13). LA AUTORA