Si todas las previsiones de los expertos sobre esta crisis han fallado, los diagnósticos han resultado equivocados y cada explicación cuenta siempre con su alternativa, cabe preguntarse ¿para qué sirve un economista?
Una defensa apasionada del gremio de libreros escrita en 1763. Un lúcido ensayo de Diderot sobre los aspectos más controvertidos del comercio del libro.