Tres mujeres de tres generaciones diferentes de una misma familia reflejan cómo las relaciones sociales, sentimentales y familiares se han transformado con el cambio de siglo.
Una historia de ausencias y de arrepentimiento, narrada con una prosa precisa que enmarca el sentimiento de culpa de Mateo, su protagonista, lastrado por haber perdido casi la única posibilidad que tendrá de ser feliz.
Se trata de una reflexión sobre nuestras relaciones con los animales y la diferencia esencial entre los miramientos que debemos tener con ellos y las obligaciones éticas que tenemos con los humanos.