José María Rueda Alcántara
«Cuando el dedo del sabio señala la luna, los imbéciles se quedan mirando al dedo». Dicen que es un refrán chino. Alguien tiene que hacer de dedo que señale en nuestra ceguera cómo es Dios. Nadie le ha visto. El que se fía de Jesús sabe que Él lo ha visto y nos dice cómo es. Miramos adonde señala (...)