Tellado, Corín
No me engañes otra vez: "En la puerta del club, los dos hombres se despidieron.
Eran las dos de la tarde. Míster Mac Dowall apretó la mano que el doctor Mills le alargaba, se la oprimió con fuerza, y con aquella su sonrisa de hombre satisfecho de la vida, repitió por tercera vez:
—Recuerde, doctor (...)