Un recetario ilustrado destinado a acercar a los niños al proceso culinario,
   La idea del reconocido chef es que los padres integren a sus hijos a la  cocina y, en este proceso, puedan educarlos alimenticiamente.
 A través de setenta recetas (programadas para toda hora del día), los  padres podrán vigilar la alimentación semanal de sus hijos mediante un juego interactivo.
 El juego consiste en colorear las hojas de unas margaritas (adjuntas en  el libro como estampillas), las cuales representan, cada una, un grupo  alimenticio distinto: lácteos, carnes, legumbres, verduras y hortalizas, frutas, pan y pastas, grasas y aceites.
 La idea es que el niño vaya marcando si comió o no los respectivos  grupos alimenticios y los padres puedan chequear si siguieron o no una dieta balanceada.